Por: Diego Almeida, Maria Jose
Garcia Vasquez
Llegamos a las 4:30 p.m. a la
universidad para la entrevista. Él tenía que entregar un proyecto final a las 4:00p.m.,
así que decidimos esperarlo. La espera fue mucho más larga de lo que creímos, ya
que se demoró, aproximadamente una hora. La primera impresión es importante y
cuando lo vemos salir, lo primero que hace es disculparse e invitarnos a hacer
la entrevista. Es curioso cómo estábamos entrevistando a una persona que tiene
nuestra edad, y, en tan poco tiempo ha logrado lo que haríamos en 3 vidas. Su
actitud fue amable. Él estaba un poco nervioso y agradecido por la entrevista;
realmente, era alguien muy agradable. Sin darnos cuenta, la entrevista parecía
más una charla entre amigos que se conocen toda la vida. Es increíble la
soltura y la confianza que tiene con gente que ni conoce; todo un artista.
Los estragos del tiempo.
Cristian nos cuenta cómo,
según él, se demoró en lograr sus metas. Cristian, en ese tiempo de juventud, sentía
que si no tenía un gran equipo no podría cumplir su sueño y hacer una buena
producción. “Nunca estamos limitados. Con un celular tú puedes hacer grandes
cosas”, dijo con una sonrisa. Cristian comentó que si pudiera darle un consejo
a su yo de hace 5 años, sería que se atreviera a hacer las cosas sin pensar
tanto en sus límites. También nos cuenta cómo antes de empezar, los profesores
de la universidad lo menospreciaban y criticaban por sus creaciones audiovisuales,
y después que salió una entrevista que le hicieron en El Heraldo todo el
mundo lo felicitó. “Aquellos que me criticaban, hoy me felicitan".
Primeros pasos
En la boda de su prima, ella le
pidió el favor para que grabara y tomara fotos. Él, sin pensarlo dos veces, aceptó
y le pidió a un amigo que le ayudara a cubrir. Hoy ese amigo es Alejo Manjarrez,
su socio, quien desde el compinche en las bodas, tuvieron mucha química. Ellos empezaron
a trabajar juntos en Sunshine Media y durante mucho tiempo no consiguieron
ningún trabajo. Después de cuatro meses, les salió un trabajo de grabar un
video musical con el presupuesto de tan sólo cuarenta mil pesos. Su equipo de
trabajo, en ese entonces, no era más que una cámara prestada, un trípode dañado
y un mar de creatividad. Él nos cuenta que, en ese momento, para ellos el
resultado fue el mejor video, pero su yo de ahora lo ve, y piensa completamente
lo contrario.
Grandes logros y futuros
proyectos
Cristian nos cuenta cómo llegó
a trabajar con artistas de la talla de Mau y Ricky: “Yo tengo un amigo
fotógrafo. Él fue fotógrafo de Piso 21 y en una gira, él conoció a Mau y
Ricky, quien fue el fotógrafo principal de Piso 21. Ahora es el
fotógrafo principal de Mau y Ricky; se llama Lucho Sierra. Cuando Mau y Ricky
vinieron a Barranquilla para una gira de medios: “Él le dice a mi amigo que
necesita alguien que los grabe porque él no puede asistir y mi amigo le da mi
contacto. Yo grabé unas tomas y se las envié, el man quedó encantadísimo con el
trabajo y a las dos semanas me fui con ellos a Santa Marta para grabar el video
de La Boca; no es mío el video, pero hice parte de la producción”.
Después de eso, Mau y Ricky lo
volvieron a contactar para que fuera a Venezuela con ellos y siguieran
trabajando juntos: “Nos contó que el día anterior lo contactó la productora de
Nacho para grabar un video el 17 de junio. En ese momento, nosotros nos
sorprendimos muchísimo. No todo el mundo logra eso".
Consejos y motivación
Aquí le preguntamos, ¿qué consejo le darías a alguien que
está empezando en esto de la producción audio visual? “Yo creo que... ¡Que lo
haga! Que deje de pensar en si hay alguien mejor o no. Yo era así, yo pensaba
como que ‘yo para qué voy a hacer videos si ya hay gente mejor’. Entonces, me
dispuse a buscar qué podía hacer en Barranquilla que fuera innovador, porque ya
en videos musicales está Mau Prince (6609 Flims). Él es de aquí, de la Autónoma
del Caribe y era mi referente y mira, comencé a hacer videos musicales para que
la semana pasada mi referente, Mau Prince, me escribiera pidiendo que fuera uno
de los expositores de un taller que prepara. Con todo esto, quiero decir que
hay que lanzarse a lo quieras hacer. Que no te dé miedo hacer las cosas, porque
así, seguramente, va a haber gente que no le va a gustar. Como mis profesores,
por ejemplo, que no les gustaba lo que yo hacía. Tarde o temprano al trabajo
duro le llega su recompensa.
Nos cuenta cómo su papá ha
estado metido en la iglesia, ya que toda su familia es cristiana. Nos comenta
que él comenzó con esto de las cámaras porque en la iglesia hay un programa de
televisión, y a él le encantaba. Sus papás fueron su apoyo número uno: le brindaron
todo lo que necesitaba para hacerlo feliz; unos padres ejemplares. Él nos dice
“No pude haber llegado hasta aquí sin el apoyo de mis papás”.
Cristian es una persona muy
amable y carismática, que hace un tiempo no se atrevía a hacer las cosas y
ahora no le tiene miedo a nada. Alguien agradecido con su familia, con sus
amigos y con Dios. Él invita a todas las personas a seguir sus sueños y a
superarse cada día, y, sobre todo, dejar el miedo a un lado para así alcanzar
tus metas.
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