Por Germán A. Ruiz Zirene
Era una mañana común y
corriente. Hacia un día soleado y agitado por la cantidad de pacientes que
llegan a diario a la sala de cirugía del Hospital Pediátrico Camino
Universitario Adelita de Char. El Doctor León Fonseca es el director de cirugía,
pero esa mañana se desocupó temprano, tenía que comprar unos materiales que
necesitaba para su clínica, y, por esta razón se dirigió al banco a retirar el
dinero.
De regreso desprevenido y
tranquilo, con el capital a su lado, parqueó en la clínica Betel, y no se dio cuenta
que dos hombres motorizado lo habían seguido hasta ahí. Posiblemente, estos
delincuentes ya sabían que el médico había retirado dinero de la entidad, y,
por lo tanto, no tendría nada de particular que le tocara ese día ser la
víctima, sin saber lo que le esperaba.