“La mejor manera de decir, es hacer; Las palabras pueden, pero los hechos arrasan”: Antonio Bohórquez Collazos

Por Yeeldibeth Bermúdez González y Llinás Velásquez Ana Isabel

A partir de las  múltiples noticias a nivel regional que ha despertado el excandidato a la Alcaldía de Barranquilla,  Antonio Eduardo Bohórquez Collazos, nacido en Barranquilla y quien se desempeña como Profesional en Derecho y Comunicador Social, especialista en  Derecho Constitucional y Administrativo, nos motivó  hacer esta entrevista para dar a  conocer su participación dentro del referendo de valorización y qué tanto se ha visto afectado el distrito por la gestión que desarrolla; generando también, una contribución al cambio de pensamiento, actitud y crecimiento a  las minorías y comunidades  de bajos recursos económicos que, actualmente, se encuentran azotados en nuestro país.

Además, nos ayuda a darnos cuenta que aún existen personas que se interesan por la comunidad, que buscan la forma de  estimular a los seres humanos  y conmutar al momento de tomar una decisión, a tener sentido de pertenencia con la ciudad, y,  finalmente, a  crear un desarrollo favorable para ella.

En vista de que obtuvo un tercer puesto en las elecciones a la Alcaldía, ¿volvería a lanzarse a esa candidatura?

No es descartable, el hecho de haber obtenido con casi cero pesos, y con muy pocos recursos haber tenido una votación muy significativa en esta ciudad, me ha convertido en una especie de actor social, político, cívico, comunitario, de injerencia de casi todos los  temas, que para mí ya es un triunfo, lo que más adelante se presente lo estudiaremos con la gente,  los sectores, y los grupos sociales en que avanzamos. Pero reitero ¡No es descartable!

¿Tiene algún proyecto en especial con los taxistas o de los grupos de familias que lidera?

Nosotros seguimos trabajando en término de lo social, por ejemplo, seguimos con nuestra lucha de seguridad social que va muy avanzada  en salud y en pensiones de los taxistas, que  son veinte mil en la cuidad.  Hay un número de madres comunitarias con la que hemos venido luchando y apoyando, donde se han visto los frutos de su inserción en el mercado laboral como trabajadoras del Estado y no como  contratistas. Aproximadamente,  tres mil familias buscan que se le indemnice la afectación por el carbón que los  ha dañado en los últimos años; además, hay un grupo de jóvenes que están con el  propósito  de ingreso digno con el frente amplio cívico que llevó de  los abusos que se han dado con la valorización y eso ha dado muchos frutos importantes y seguimos avanzando en los términos de los resultados sociales.

En su rol de abogado, ¿cuál es su posición frente a las medidas de regulación que está tomando la Alcaldía con los transportadores públicos?

Hay un causante de esa problemática del transporte y el tema de la movilidad, que es la Alcaldía y las fuerzas distritales, sin lugar a duda, el caso de los taxistas que hoy día haya una sobre oferta de los 12 mil que se necesitan ¡cómo es posible que hayan 20mil!,  No solo eso genera problemas en la movilidad, sino que también afecta en la contaminación que se traduce a desmejoras en el ingreso monetario de los taxistas. Entre ellas, contaminación visual, auditiva, etc.; por ello, creemos que eso debe tener una solución de fondo, ya no es solo llegar a reprimir cuando no se previno, porque debe existir un paradigma que es lo más importante donde se dé  la prevención, para evitar la reprensión.

En el período de elecciones, ¿le fueron ofrecidos otro tipo de cargo público?

No, en ese momento tomamos una decisión de que nosotros no declinábamos y que íbamos hasta el final, hay una experiencia en cargos públicos, hemos sido secretario de despachos, secretario general, gerente de relaciones laborales, secretario de vivienda del distrito, y eso ha dado conocimientos a lo largo de las representaciones obtenidas. En estos momentos, aunque hubo posibilidades, dijimos que no porque sabíamos el compromiso que teníamos.

¿Hacia qué punto lleva encaminada su gestión política?

Yo, exactamente lo que intento es  hacer  una contribución humilde y formidable para construir movimientos y sectores sociales  que, en últimas, serán los que ayudarán a resolver la problemática y, especialmente, en el cambio de modelo. Creo menos en los partidos y más en los movimientos y  en las organizaciones sociales.

A partir del momento que decide lanzarse a la candidatura, ¿quiénes fueron su principal apoyo y motivación?

Se produce esto porque las organizaciones sociales, los equipos de trabajos, jóvenes, los líderes populares, los taxistas, madres comunitarias, personas que hemos venidos asesorando, impulsaron esta propuesta yo les dije que sí y la llevamos a un término importante.

A lo largo de su conocimiento en la administración pública, ¿quién cree que ha sido el o la mejor Alcalde o Alcaldesa?

Yo creo que uno mira por los resultados y los frutos; en algún momento, cada alcalde ha querido hacer algo importante por la cuidad, hasta ahora no puedo decir que me he puesto en la tarea de verificar quién es el mejor o peor alcalde, lo que sí es cierto es que esta ciudad tiene un desfase alrededor de 70 años con respecto a otras del mismo país y en contexto latinoamericano, nos falta avanzar muchísimo. Creo que no es solo un problema de alcalde o alcaldesa,  es problema social y estructural que se soluciona entre todos.

¿Cuál cree que es su principal y mayor estrategia para el cambio que necesita la ciudad?

Si hay algo que hacer en especial, es el cambiar la mentalidad de la gente, es que nosotros no hemos avanzado a ser una ciudad porque no hemos construidos ciudadanos. Se ameritan un profundo proceso de ciudadanización, esto es de sentido de pertenencia, de integrarnos con la cuidad y, por supuesto, de replantear el concepto de la cuidad que tenemos, que, por ahora, lo mas importantes han sido las construcciones   materiales, de cemento y demás, aquí lo que importa es el ser humano;  por eso, gran parte de las obras son parte de una tesis de progreso, son contrarias al desarrollo sostenible de la dignidad humana, en eso hay que intervenir profundamente.

En su liderazgo del referendo de valorización, ¿qué respuestas positivas ha conseguido?

Bien, frente a este tema de la iniciativa popular, que no tiene antecedentes en la región norte, esta ha sido parida desde la ciudadanía misma, hemos conseguido alrededor de 60 mil firmas; lastimosamente, la Registraduría no ha actuado de manera ética, ya lo hemos criticado públicamente, y ya interpusimos los recursos de ley para eso, pero haber recibido 60 mil firmas de apoyo para una iniciativa de este tipo , en una ciudad tan compleja para la participación como Barranquilla, es un gran triunfo y una gran logro. Y me siento bien, lo que plasmamos en ese proyecto, es lo que debe ser la ciudad soñada, y el que lo hayamos logrado a punta de trabajo, esquina por esquina, universidades y barrios, es, sin lugar a duda, una señal de que estamos empezando a crear otra forma de visionar la ciudad.

En su experiencia como escritor y columnista, ¿ha hecho algún comentario que más adelante haya tenido que contradecir?

No, en principio no  el humano es esclavo de lo que dice o escribe y rey de lo que calla. Por eso, trato de hablar muy milimétricamente, por ello siento que he evolucionado positivamente, de aquel ser soberbio y prepotente, hoy mi mayor deleite es en ser un relajado, bacano, humilde y tranquilo; y de aquel tipo verborrágico  que creía que el mundo lo resolvía,  hoy trato de ser lo más breve posible… En algunos casos, porque hay episodios en los que uno debe hablar mucho para convencer (risas).

¿Tiene alguna frase que lo identifique?

Tengo 2 o 3 que me inyectan todos los días, la primera  “El que tengo ojos para ver que vea, el que tenga oídos para que oír que oiga y entienda”, ésta, que es netamente cristiana, y base de lo que hace parte de mis confesiones diarias; “Nadie se salva solo, nadie salva a nadie, solo nos salvamos entre todos”; y finalmente, “La mejor manera de decir, es hacer, las palabras pueden pero los hechos arrasan”.