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miércoles, 18 de septiembre de 2013

“No somos jueces de la república, nuestro deber es informar”: Sergio García

Por  Laura Bruzón y Pierangelli Biava

Imaginamos que no sería fácil entrevistar a un apasionado por el género periodístico considerado la base del periodismo: la entrevista; sin embargo Sergio García, que afirma que todo el tiempo está haciendo entrevistas, preguntando, cuestionando y actualizado sobre lo que pasa, además de ser un excelente periodista, conductor y director del programa Impacto de Telecaribe, y además ha trabajo para diferentes medios de comunicación.

Admirador de colegas como Jaime Bayly y Clara Elvira Opsina, Sergio es una persona con muchos proyectos y muchos sueños aún por cumplir, muchas cosas por enseñar y del cual hay mucho por aprender, ha logrado en su vida todo lo que se ha aspirado y ha logrado entrevistar a todos aquellos que se lo ha propuesto. ¿Qué hay detrás de este barranquillero neto, amante del Junior y del carnaval, y qué tiene por enseñarles a todos aquellos futuros periodistas?


¿Cómo se define Sergio García?

Me defino como un hombre con muy buen sentido del humor; no del común y corriente, me gusta ser siempre en lo que hago: el mejor, por ejemplo, cuando estaba en el bachillerato, yo hacía unos dibujos de geografía muy bonitos, y hasta me ganaba el dinero con eso, porque mis compañeros me pedían que les hiciera el mapa geográfico, y yo se los hacía y se los vendía, transcribía los exámenes, los trabajos de redacción, entonces, siempre me ha gustado ser... intentar ser el mejor. Cuando hice radio, cuando hablaba quería ser el mejor que lo hiciera, y cuando hago televisión quiero ser el mejor, eso es como un reto conmigo mismo, no sé si lo sea, pero quiero ser el mejor; entonces, no me considero una persona común y corriente,  me considero un hombre actualizado, muy actualizado, te podría hablar de cualquier tema, y sé que no me podrían corchar, por esa razón siempre estoy leyendo el Twitter, viendo noticieros, leyendo medio de prensa a nivel web, ya casi no los veo físicos, pienso que la web me ha capturado mucho en ese sentido, porque pienso que el físico se desactualiza muy rápido, yo antes compraba El Heraldo todos los días, pero ya a las 6am  esta desactualizado, en cambio en la web esta todo minuto a minuto al día, El Tiempo lo veo, El Espectador, Zona Cero, me encanta estar actualizado, eso me conlleva a decir que me siento diferente, no del común y corriente, mientras mis amigos de pronto estarán escuchando vallenato, que a mí me gusta el vallenato, yo estaré leyendo “elheraldo.com” para estar actualizado, que es mi trabajo, además.

¿Qué es el periodismo para usted, y qué busca a través de este?

Algún colega decía recientemente, a uno ahora en las redes sociales lo critican por todo, ahora es muy fácil disparar por las redes sociales; y un amigo colega Alberto Salcedo, creo que es, decía que somos como el termómetro, el termómetro no cura la fiebre, pero te detecta si tienes la temperatura alta, para mí eso es el periodismo, es analizar la información, la noticia, evaluar la información, y a veces no juzgar, sino que dejar que la gente juzgue, eso es el periodismo, o sea tratar los temas como si fuera un termómetro, analizarlos profundamente, y que la gente concluya, no sentirnos jueces de la república, no actuar de jueces, sino informar, y siempre intentar verificar la fuente de la información, para bajar el margen de error al mínimo, para no caer en eso de que tu informaste algo y estabas equivocado, ahora con las redes sociales tú dices “a” y era “b” y al segundo ya te están corrigiendo, entonces, estar muy actualizado para no caer en ese error.

¿Cómo preparas tus entrevistas y crónicas?

Siempre que voy hacer una crónica, yo quiero que sea muy vista, que tenga mucha recordación, que tenga mucha sintonía, siempre intento eso. Siempre cuando voy a entrevistar a alguien me empapo de quien voy a entrevistar, leo su biografía, sino es alguien que tengo biografía en redes sociales o en internet, empiezo a investigar, llamo a un amigo, a la esposa, sin que la persona sepa, y empiezo a documentarme, porque yo pienso que la clave está en hacer preguntas que los demás no hacen; si yo voy a entrevistar a Pepito Pérez, todo el mundo preguntara lo común, yo intento hacer una pregunta diferente, ahí esta la respuesta a la primera verdad, yo pienso que de mis mejores bondades es la entrevista, y lo he logrado porque me documento, de quien voy  a entrevistar, y me documento en buscar preguntas que nunca le han hecho, por ejemplo, este martes vamos a emitir un programa que se le hizo a Edgar Perea, el campeón, y le hice preguntas que nadie le ha hecho, como por ejemplo, ¿Qué paso con doña Celia?, ¿Su esposa reciente? Hubo un lio jurídico muy bravo, él ahora está felizmente casado, casi se muere en octubre, a él lo operaron, estuvo al borde de la muerte, el antes de ser embajador en Sudáfrica, después de ganar tanto dinero estuvo en menos cero, se quebró económicamente, y yo tenía temor de tocarle esos temas, pero se lo toque en su momento dado, buscando el momento preciso, hablamos del tema, sus ojos se quebrantaron un poquito, y me dijo sí yo me fui a la quiebra, me fui a menos cero, que “el negro”, el campeón diga eso, con su ego tan alto, me pareció espectacular.

Eso es resultado de haberme documentado, de saber qué preguntas no le han hecho, y preguntar lo que nadie se atreve a preguntar. No hay malas preguntas, hay preguntas mal hechas, hay que esperar el momento oportuno para lanzar la pregunta. Y lo último que sí está claro, es preguntar lo que el televidente quiere saber, o sea el que está viendo el programa de televisión, que se sienta identificado conmigo, que crea que es él el que está preguntando; si entrevisto a un sicario, esa persona querrá saber, ¿Será que la esposa sabe que él es sicario?, o ¿Será que la mamá sabe que él es sicario?, y preguntarle eso, o ¿Será que en la casa, saben que el sicario y vivirán de eso? Ese es su fuente de ingreso, y yo pregunto, capto enseguida y capturo al televidente, porque estoy preguntando lo que él quisiera preguntar. Esa es mi fórmula secreta que hoy la hago pública.

¿Qué haces en caso de que esa persona no quiera responder ciertas preguntas?

 Hay personas muy difíciles, como las mujeres, hay mujeres que no caen en la primera, no caen en la segunda, pero todas tienen una caída, puede ser un dulce, un helado, una canción, compañía; así es el entrevistado, y me han tocado personas muy difíciles, hay que empezar a melodiar como un tiburón, hasta que cae, hay que estar muy bien documentado, hay personas que son monosílabas, que no tienen buena expresión, y yo estoy en plena entrevista y sé que está floja, sé que no aguanta ni un minuto al aire, y empiezo como el goleador, por la izquierda, por el centro, hasta que encuentro donde él ya se despierta y empieza hablar, ahí sí toca sacar toda la experiencia, para volver interesante esa entrevista.

¿Cuál ha sido el entrevistado que más lo ha marcado?

Bueno, yo esta semana… tengo el ego muy alto,  yo no soy así, pero es que esta semana entreviste a dos personas que quería entrevistar, una es Juan Gossaín, yo a él lo admiro mucho, me quito el sombrero ante él, es como un maestro para mí, trabajamos 10 años juntos, pero siempre fue “Don Juan Gossaín” y él no da entrevistas, y menos en su casa, y logré ir a su penthhouse en Cartagena, y logré estar allí con él hora y media, y le saqué el jugo hasta el fondo, para mí fue algo espectacular, hablar con él bellezas de su vida, pero lógicamente, si volvemos al principio, y yo llego y le pregunto: Don Juan ¿Usted cómo se inició en el radio? Ya él enseguida baja la guardia, yo le dije al principio, “Don Juan, estoy aquí en su penthouse, donde nadie puede entrar, porque quiero que me explique la convivencia y la boda indeleble entre kibbe y la arepa con huevo” enseguida los ojos le brillaron, porque él es árabe, y la comida árabe ya es parte de la comida de la mesa colombiana, cuando yo le hice esa pregunta se emocionó y no quería parar de hablar, entonces le di donde era, yo sabía que ese era el punto débil de él, esa entrevista me encanto mucho, por lo difícil.

¿Qué es lo más gratificante de su trabajo?

Lo más gratificante es ayudar a las personas, desde todo punto de vista, yo he hecho muchas campañas sociales; antes me tildaban de amarillista, pero siempre busqué un beneficio a esa persona. Siento que informa cosas que la gente quiere saber, hace poco me pasó algo muy duro en twitter, yo publiqué una información, de un camión que se accidentó y que el conductor estaba gravemente herido, y una mujer me empezó a preguntar sobre el tema,  y, luego me dijo que era su esposo; entonces, empecé a investigar y hablé con la enfermera que lo estaba atendiendo; al día siguiente el señor murió, y me tocó decirle que había muerto, fue muy doloroso, pero me sentí útil, por muy dura que sea la información, rico ser útil en la sociedad, e intentar mejorar la calidad de vida de las personas también.

Lo que ha desarrollado como su plan de vida hasta ahora en el ámbito profesional, ¿lo ha cumplido?

Sí, me falta todavía mucho. Yo me imagino trabajando para el exterior, pero ojalá fuera desde aquí. He cumplido las metas que me he trazado, cuando yo estaba muy joven, yo quería estar en radio, y llegue a trabajar a los 14 años en una emisora de baladas, después quería ser director de una emisora de baladas y lo fui a los 19 años, que fue RCN Barranquilla estéreo, después quise hacer televisión y lo hice; luego, quería ser primer lugar, eso no te da plata, pero te llena de satisfacción, es como la gasolina, y llegué a ser número uno en Impacto con Telecaribe, después quería ser diez veces número uno y lo fui. Me faltan muchas metas aún, muchas, no voy ni por la mitad creo yo.

¿Qué personaje sueña entrevistar?

Me hubiese encantado entrevistar a Pablo Escobar, pero ya murió, lo hubiera confrontado. Yo a él lo llegué a admirar, con todo lo criminal que fue, me he leído la vida de Escobar completa, pero lo hubiera confrontado, me hubiera gustado estar sentado con él y decirle, yo a usted le admiré su inteligencia, pero fue muy criminal, mató mucha gente, el hombre tenía sus cosas buenas también, pero muchas cosas malas, pero me hubiera encantado escudriñarlo ¿Qué lo volvió asesino? Él muere por su familia, muere por ella, por una llamada. Cuando a él lo sepultan, la hermana dice: “No sean estúpidos, ¿ustedes creen que si Escobar muere se acaba el narcotráfico?” y han pasado 20 años y sigue el narcotráfico, o sea que no bastó con su muerte.

¿Qué virtudes considera que debe tener un periodista para tv?

La virtud más importante es no hablarle al micrófono, ni a la cámara, hablarle a la gente; muchas veces los locutores le quieren hablar al micrófono, se concentran en que la voz le salga bonita y se vuelve tedioso para el oyente, hoy hay que lograr que el oyente, con tantas herramientas que hay y tanto tv cable, que te escuchen 5 minutos, ya eso es una proeza; y en televisión, tú tienes un remoto que tiene 100 canales; entonces, medio espabila el presentador, y cambian el canal, porque uno quiere saber qué hay en todos lados, uno quisiera ver todos los 100 al mismo tiempo; entonces, para mí la clave está en no hablarle a la cámara sino al televidente, para que intentar que se quede 5 minutos con uno. Lo hago con mis historias, duran 30 minutos; entonces, no quiero que caiga el balón, que siempre este ahí interesante para que la gente no se mueva del canal.

Después que fue emitido el programa de “La Rectora”  del cual usted fue parte, ¿tuvo consecuencias por lo dicho en este?

Me atacaron mucho, pero después ya se calmó la cosa, no se olvidó, me atacaron y en el segundo tiempo hablaron bien; entonces, yo evalué. Primero no me arrepiento de haberlo hecho,  porque te repito uno no puede sentirse juez de la república, solo porque tienes un medio de comunicación vas a condenar. La doctora Silvia Gette está en un proceso, si ella es culpable va a pagar su condena, si ella cometió un error tiene que pagarlo, pero no podemos condenarla sin antes ser juzgada, no podemos disparar y después preguntar ¿a quién le disparaste?; entonces, dejemos que se encargue la justicia.

¿Qué emociones o sentimientos viene a su mente al escuchar estas palabras?

Barranquilla: La ciudad más feliz del mundo.

Junior: Es la novia que te es infiel, que te pega chachos, y uno sigue allí al lado, imposible dejar esa novia, Junior.

La Troja: Es patrimonio cultural de Barranquilla, y es el lugar donde me desestreso, cargo baterías, y cada mesa tiene su historia, García Márquez escribiría muchas historias si se sentara en La Troja.


Carnaval: Colorido, y convierte a Barranquilla en la capital de Colombia en esos cuatro días.

5 comentarios:

  1. Muchos consejos para tener en cuenta, como periodistas en formación.

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  2. Excelente entrevista a un gran profesional en su trabajo como lo es sergio.

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  3. Muy interesante y muy completa! Felicitaciones!

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  4. interesante respuesta sobre el personaje que desea entrevistar , muchos no tuvieron el valor de confrontarlo y otros con los mismos deseos de el querían informar sobre ese monstruo que una vez fue la pesadilla de colombia .

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